Una revisión de 26.000 casos ha encontrado que el consumo de alimentos ricos en calcio como la leche y el queso, así como los suplementos pueden reducir ligeramente el riesgo de desarrollar cáncer de mama.

El cáncer de mama es el cáncer más común en las mujeres y se encuentra en quinto lugar en la mortalidad por cáncer. El Fondo Mundial de Investigación del Cáncer calcula que casi el 40% de casos de cáncer de mama podrían evitarse con cambios de estilo de vida. Los factores modificables establecidos que incrementan el riesgo de cáncer de mama son una mayor ingesta de alcohol y el aumento de la obesidad. Las disminuciones en el riesgo están relacionadas a la lactancia materna y posiblemente a la realización de más ejercicio y a un estado activo de vida.

Detalles del meta-análisis

Las ingestas de calcio de los alimentos y suplementos se obtuvieron de más de 870.000 mujeres a través de 11 encuestas. Los estudios fueron todos prospectivos, por lo que ninguna de las mujeres tenía un diagnóstico de cáncer de mama durante el reclutamiento.

Se calculó la ingesta de calcio por un cuestionario de frecuencia alimentaria, o por uno o más cuestionarios de ingesta diaria de alimentos de 24 horas.

De los 11 estudios seleccionados para este meta-análisis, cinco fueron realizados en los Estados Unidos, cinco en Europa, y uno en Singapur. Uno de los estudios en Europa fue parte de la Investigación Prospectiva Europea en el Programa de Investigación del Cáncer (EPIC) (Abbas, 2013).

Las mujeres reclutadas fueron monitoreadas durante un período de al menos siete años, y durante este tiempo, más de 26.000 recibieron algún diagnóstico de cáncer de mama.

El riesgo relativo global de cáncer de mama en mujeres con ingesta alta de calcio (en comparación con ingestas bajas) fue de 0,92. Las altas ingestas de calcio de todas las fuentes sugieren una reducción del riesgo de diagnóstico de cáncer de mama de alrededor del 8%.

Otro análisis de subgrupos demostró unos efectos protectores más fuertes de las ingestas de calcio en el diagnóstico de cáncer de mama realizado antes de la menopausia; las asociaciones entre el calcio y el cáncer de mama diagnosticado en mujeres postmenopáusicas fueron más débiles.

También hubo un efecto dosis-dependiente. Los investigadores revelaron que cada aumento de 300 mg en la ingesta de calcio se asoció con una reducción del 2% en el riesgo total de la diagnosis del cáncer de mama.

Hubo una tendencia leve de un mayor beneficio del calcio observada en las mujeres en el rango inferior de las tomas (por debajo de 800 mg por día), mientras que fue menos fuerte en las mujeres en el rango más alto de ingesta de calcio.

Referencia

Hidayat K, Chen GC, Zhang R, Du X, Zou SY, Shi BM, Qin LQ. Calcium intake and breast cancer risk: meta-analysis of prospective cohort studies. Br J Nutr. 2016;116(1):158-66. doi: 10.1017/S0007114516001768.