Según este estudio, el psyllium, un suplemento de fibra soluble, gelificante, sin fermentar, puede ayudar a los consumidores a encontrarse saciados.
El consumo de 6,8 gramos de psyllium antes de desayuno y comida durante tres días dio lugar a puntajes significativamente más bajos en la escala analógica visual (EVA) sobre el deseo de comer y sobre el hambre post-desayuno y post-comida.
«Es razonable la hipótesis de que el efecto de la suplementación de la fibra de psyllium o psilio alimenticio en la saciedad podría ser útil en el control de peso», escribieron los investigadores en Appetite.
«Los resultados de estos dos estudios indican que el psyllium tiene un efecto de inductor de la saciedad pero será necesaria una mayor investigación para determinar su relevancia clínica como una herramienta para promover una ingesta energética menor y participar en el control de peso».
Detalles del estudio
Científicos de Procter & Gamble Personal Health Care, la Universidad de Colorado y la Universidad de Purdue realizaron dos estudios: el primero fue determinar una dosis óptima, y para ello realizaron un estudio cruzado aleatorizado, doble ciego, controlado con placebo usando 3,4 g, 6,8 y 10,2 g de psyllium. Los participantes consumieron estas dosis antes del desayuno y de la comida durante 3 días.
Este primer estudio indicó que se obtuvieron reducciones mayores en la escala EVA para el hambre y deseo de comer con las dos dosis más altas, en comparación con la dosis de 3,4 gramos, pero no hubo diferencias entre las dosis de 6,8 y 10,2.
Un segundo estudio utilizó los 6,8 gramos determinados en el primer estudio. Los participantes consumieron la dosis de psyllium antes del desayuno y de la comida durante dos días y luego sólo antes del desayuno al tercer día. El desayuno tenía niveles más bajos de calorías (energía restringida) que el observado en el primer estudio.
Los resultados del segundo estudio indican que las medidas de saciedad eran semejantes a las del primer estudio, a pesar de tener un desayuno energético limitado.
«La fibra dietética afecta a la saciedad en muchas maneras, dependiendo del tipo de fibra y en relación a su capacidad de aglomerar alimentos, aumentar la viscosidad, gelificarse en el estómago y fermentar en el intestino», explican los investigadores. El psyllium es una fibra viscosa soluble que tiene la capacidad de convertirse en gel en el estómago. Ambos aspectos son importantes para la eficacia del psyllium.
«Las fibras que forman el gel (tales como el psyllium) pueden influir en la saciedad por varios mecanismos, incluyendo el retrasar la degradación y absorción de nutrientes en el intestino, conduciendo a una entrega ‘sostenida’ de nutrientes; y permitinedo una entrega de nutrientes al íleo distal con el subsecuente estímulo de mecanismos de retroalimentación, como el fenómeno de «freno ileal» (retrasa el vaciamiento gástrico y el tránsito del intestino delgado) y la disminución del apetito. Estos mecanismos propuestos implican la participación de las hormonas del intestino y sistema nervioso central favoreciendo la mayor sensación de saciedad».
Los investigadores también consideraron los potenciales eventos adversos entre los participantes y solo encontraron síntomas gastrointestinales leves y fueron similares entre los grupos de psyllium y placebo.
Referencia
Brum JM, Gibb RD, Peters JC, Mattes RD. Satiety effects of psyllium in healthy volunteers. Appetite. 2016;105:27-36. doi: 10.1016/j.appet.2016.04.041.