La suplementación con una combinación de chitosan y almidón resistente puede ayudar a prevenir la obesidad y la diabetes, según este estudio sobre ratas llevado a cabo por científicos en China y Australia.
Descubrieron que el tratamiento con complejos de chitosan y almidón puede controlar el peso del cuerpo y del tejido adiposo, y mejorar la composición de lípidos en la sangre y el estado antioxidante de manera más efectiva que el chitosan o los almidones resistentes solos.
El chitosan es un tipo de fibra derivada de la quitina, una sustancia que se desarrolla en las cáscaras externas duras de los crustáceos.
Detalles del estudio
Este estudio investigó el efecto de intervención de chitosan (CS), almidón resistente (RS) y complejos de chitosan y almidón (CL) en la glucosa sanguínea, la composición de lípidos y el estrés oxidativo en ratas alimentadas con una dieta rica en grasas.
En el estudio, publicado en Carbohydrate Polymers, los investigadores afirmaron que «comparada con RS o CS solo, la administración de CL fue más eficiente para controlar el peso corporal y la masa de tejido adiposo, junto con un aumento en la concentración de colesterol de lipoproteínas de alta densidad y la supresión del estrés oxidativo al aumentar la capacidad antioxidante del cuerpo».
«Este estudio encontró que la administración de CL tuvo la mayor eficacia en la atenuación de la disminución de HDL-C causada por la dieta alta en grasas que el tratamiento solo con RS o CS. «Este rendimiento puede estar asociado con el efecto sinérgico del almidón resistente y el chitosan en la regulación del metabolismo de los lípidos».
Según los investigadores, hubo una notable reducción en los pesos corporales de los grupos de intervención, hasta en una quinta parte, y el grupo tratado con CL mostró la reducción más prominente.
Mientras tanto, la administración de RS y CL redujo significativamente el peso del hígado de las ratas obesas al nivel de las ratas normales.
«Además, todas las intervenciones suprimieron drásticamente la expansión del tejido adiposo inducida por la dieta alta en grasas, con un mejor rendimiento en el control del peso de la grasa epididimal para los tratamientos con CL y RS», agregaron los investigadores.
También hubo marcadas mejoras en los niveles de glucosa y lípidos en la sangre en las tres intervenciones, siendo el grupo CL el más eficiente en la supresión del estrés oxidativo.
El estudio concluyó: «Este estudio demuestra que cuando se compara con almidón resistente o chitosan solo, el tratamiento con complejos de chitosan y almidón puede atenuar eficazmente la disfunción metabólica observada en las ratas inducidas por obesidad en términos de control del peso corporal y del tejido adiposo y mejorar la composición junto con la mejora del estado antioxidante en el cuerpo”.
«La actividad enzimática antioxidante mejorada puede proteger las células hepáticas y mejorar la regulación del metabolismo lipídico, la función hepática y la expresión de genes relacionados con el estrés oxidativo en ratas obesas inducidas por una dieta alta en grasas. Una intervención dietética basada en una combinación de chitosan y almidón resistente puede ser una prevención suplementaria viable de la obesidad o la diabetes».
Referencia
Si X, Strappe P, Blanchard C, Zhou Z. Enhanced anti-obesity effects of complex of resistant starch and chitosan in high fat diet fed rats. Carbohydr Polym 2017;157:834-841. http://dx.doi.org/10.1016/j.carbpol.2016.10.042.