Suplementos de ácidos grasos omega-3, vitaminas, y minerales afectan positivamente el comportamiento de los niños normales en edad escolar, según este ensayo clínico pionero.

Este estudio, publicado en British Journal of Nutrition, encontró resultados significativos en dos ácidos grasos omega-3, el ácido eicosapentaenoico (EPA) y el ácido docosahexaenoico (DHA) aunque no se lograra el nivel óptimo de composición total de lípidos corporales del 8% de DHA y EPA.

Detalles del estudio

El estudio, realizado por investigadores de la Universidad de Oxford, inscribió 196 niños sanos de 13-16 años de edad en un estudio doble ciego, aleatorizado, controlado con placebo, de 12 semanas de duración a los que dividieron en dos grupos. Un grupo recibió dichos suplementos mientras que al otro grupo se les dio placebo.

Se tomaron muestras de sangre para medir el cambio en los niveles de vitaminas, minerales y de ácidos grasos omega-3 durante el estudio. Estos se encuentraron bajos al comienzo del estudio y mejoraron significativamente en el grupo que recibió los suplementos de nutrientes durante las 12 semanas del estudio.

El cambio de comportamiento se midió mediante los expedientes disciplinarios de la escuela y la escala de Conner – una herramienta de evaluación capaz de soportar el proceso de diagnóstico e identificación.

Los resultados mostraron que el comportamiento de los estudiantes que recibieron los suplementos mejoró, mientras que el comportamiento de los alumnos que recibieron el placebo empeoró.

«Deficiencias nutricionales han sido implicadas en la conducta antisocial, por lo tanto corregirlas pueden mejora la sociabilidad», dijo el investigador principal John Stein, profesor emérito de Fisiología en la Universidad de Oxford.

«Cuando se evalúa mediante pruebas estandarizadas y validadas, la suplementación nutricional puede tener un efecto protector contra el empeoramiento de la conducta».

Aunque oficialmente no se recomiendan niveles de ácidos grasos omega-3, hay acuerdo general que EPA y el DHA deberían constituir el 8% de la composición total de lípidos.

En los sujetos adolescentes en este estudio, los investigadores encontraron que estos niveles alcanzaron el 4%, sólo la mitad del % ideal. «Aunque todos los nutrientes son importantes, los ácidos grasos omega-3 lo son particularmente, especialmente cuando el cerebro está experimentando un crecimiento rápido durante la pubertad y ésta en su fuente más sensible», señaló el estudio.

«Aunque hemos logrado después del tratamiento mejoras significativas, el índice omega-3 no alcanzó el 8%, que se ha asociado con la mayor protección contra la enfermedad cardíaca coronaria. Esto puede sugerir que la duración de la suplementación fue insuficiente, y esto podría ayudar a explicar nuestros resultados decepcionantes con respecto a infracciones disciplinarias de los niños.»

El estudio concluyó que la evidencia presentada aquí sugiere que los suplementos de amplio espectro con vitaminas, minerales y ácidos grasos omega-3 pueden tener un efecto protector contra el comportamiento antisocial, cuando se evaluó mediante las escalas de Conner.

Referencia

Tammam JD, Steinsaltz D, Bester DW, Semb-Andenaes T, Stein JF. A randomised double-blind placebo-controlled trial investigating the behavioural effects of vitamin, mineral and n-3 fatty acid supplementation in typically developing adolescent schoolchildren. Br J Nutr. 2016;115(2):361-73. doi: 10.1017/S0007114515004390.