Según este estudio iraní, la administración de 30 g diarios de linaza ayudó a los participantes a reducir sus marcadores sanguíneos del síndrome metabólico más que únicamente los cambios de estilo de vida.
Globalmente, las enfermedades metabólicas como la diabetes tipo 2 y las enfermedades cardiovasculares se han convertido en una cuestión importante, que los investigadores vinculan a un elevado consumo energético junto con un estilo de vida sedentario.
La linaza es un suplemento idóneo debido a sus altas cantidades de ácido alfa-linolénico, así como de fibra soluble y precursores de la lignina.
Investigadores de la Universidad de Ciencias Médicas de Teherán señalaron que en los estudios existentes, las semillas de lino tienen un marcado potencial para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes e hipertensión. «Sin embargo, había escasa literatura publicada demostrando los efectos del grano entero de linaza en algunos componentes del síndrome metabólico en estudios experimentales y en humanos», escribieron.
En este estudio piloto aleatorizado, etiquetado abierto, controlado, los investigadores encontraron que «la administración concomitante de linaza conjuntamente con la modificación del estilo de vida fue más eficaz que la modificación del estilo de vida solamente en el manejo del síndrome metabólico».
Detalles del estudio
Los investigadores reclutaron 44 participantes, tanto hombres como mujeres, de edades comprendidas entre 18 a 70 años. Éstos fueron divididos aleatoriamente en dos grupos de 22 participantes. Un grupo consumió 30 g/día de suplementos de linaza molida marrón con ensalada en el almuerzo o la cena; el otro grupo no recibió suplementos de linaza.
Aunque sólo a un grupo se le dio a consumir linaza, ambos grupos debieron seguir un estilo de vida guiado y controlado de 12 semanas de duración, que se divulgó entre los participantes mediante una charla de unos 20 minutos, junto con la dirección de mantenimiento de registros. Este estilo de vida implicó aproximadamente unos 30 minutos de actividad física de intensidad moderada cinco veces a la semana.
En la primera semana, las mediciones antropométricas fueron observadas, y las visitas clínicas se llevaron a cabo en las semanas 4, 8 y 12.
A través de mediciones corporales y el análisis de las muestras de sangre, los investigadores encontraron que «el porcentaje de todos los participantes con síndrome metabólico fue del 34% después de la intervención, cifra significativamente menor que la de la línea base».
Desglosados los resultados por grupo, los individuos con síndrome metabólico en el grupo de linaza disminuyeron un 82%, mientras que el grupo no suplementado con linaza disminuyeron un 50%.
«Además, se observó que redujeron su peso corporal, el índice de masa corporal y resistencia a la insulina, mientras que la sensibilidad a la insulina aumentó en ambos grupos», dijo el informe publicado en Phytotherapy Research. «Sin embargo estos cambios fueron significativamente mayores en el grupo de linaza que en el grupo de control».
Los investigadores indicaron que sus hallazgos de los beneficios de la linaza en la reducción de la insulina a través de la disminución de la absorción de glucosa, que son debidos al alto contenido de fibra y lignina de la linaza, están de acuerdo con estudios previos.
Referencia
Yari Z, Rahimlou M, Poustchi H, Hekmatdoost A. Flaxseed Supplementation in Metabolic Syndrome Management: A Pilot Randomized, Open-labeled, Controlled Study. Phytother Res. 2016;30(8):1339-44. doi: 10.1002/ptr.5635.