Un modesto aumento de 4 miligramos de zinc extra cada día en la dieta puede reducir las rupturas de la cadena de ADN y mejorar los niveles de las proteínas implicadas en la reparación del ADN, el estrés oxidativo y la inflamación.

Los hallazgos de este estudio, publicados en el American Journal of Clinical Nutrition, son los primeros en demostrar que un modesto aumento en el zinc dietético reduce el estrés oxidativo y el daño al ADN.

«Nos sorprendió gratamente ver que sólo un pequeño aumento en el zinc en la dieta puede tener un impacto tan importante en la forma en que el metabolismo se lleva a cabo en todo el cuerpo», dijo el Dr. Janet King, Científico Senior en UCSF Benioff Children’s Hospital Oakland Research Institute (CHORI) y el investigador principal en el estudio.

«Estos resultados presentan una nueva estrategia para medir el impacto del zinc en la salud y refuerzan la evidencia de que las intervenciones basadas en los alimentos pueden mejorar las deficiencias de micronutrientes en todo el mundo».

El zinc es una parte esencial de casi 3.000 proteínas diferentes, e impacta en cómo estas proteínas regulan cada célula en nuestro cuerpo. Este micronutriente es necesario para muchos procesos biológicos, incluyendo el crecimiento y el desarrollo, la función neurológica y la inmunidad. Se encuentra naturalmente en los alimentos ricos en proteínas como la carne y los mariscos, con las ostras entre los más altos en contenido de zinc.

El incremento de 4 mg utilizado en el nuevo estudio es equivalente a lo que los cultivos biofortificados como el arroz con zinc y el trigo con zinc, los cuales pueden agregarse a la dieta de poblaciones vulnerables deficientes en nutrientes.

Detalles del estudio

Este estudio aleatorizado controlado de seis semanas incluyó a 18 hombres que consumían una dieta que contenía 6 mg de zinc por día durante dos semanas, seguido de cuatro semanas de consumo de una dieta que contenía 10 mg de zinc por día.

Los resultados mostraron que el total de zinc absorbido aumentó con el aumento de zinc en la dieta, pero la concentración de zinc en el plasma no cambió. El pool de zinc del cuerpo tampoco cambió, dijeron los investigadores.

Las rupturas de la cadena de ADN en los leucocitos disminuyeron con el aumento del zinc en la dieta, dijeron los investigadores, mientras que el aumento de zinc en la dieta también restauró el nivel de las proteínas implicadas en la reparación del ADN y las funciones antioxidantes e inmunes.

«Las múltiples respuestas metabólicas a un aumento marginal en el zinc dietético que se observaron en este estudio sugieren que el marco que se utiliza para evaluar el estado de zinc necesita ser modificado», escribieron los investigadores. «Cambios modestos en el zinc dietético, como es típico con los cambios en la composición de las dietas humanas, causaron un cambio en las concentraciones séricas de múltiples proteínas, reflejando así varias funciones metabólicas en lugar de un biomarcador único, específico”.

«Las proteínas que se asocian con la prevención de daños en el ADN, estrés oxidativo, y la inflamación cambiaron sin que se observase ningún cambio en las concentraciones plasmáticas de zinc”.

Según King, estos resultados son relevantes para la planificación y evaluación de soluciones basadas en alimentos para mitigar el impacto del hambre y la desnutrición. El científico de CHORI cree que la biofortificación puede ser una solución sostenible a largo plazo para la deficiencia de zinc.

Referencia

Zyba SJ, Shenvi SV, Killilea DW, Holland TC, Kim E, Moy A, Sutherland B, Gildengorin V, Shigenaga MK, King JC. A moderate increase in dietary zinc reduces DNA strand breaks in leukocytes and alters plasma proteins without changing plasma zinc concentrations. Am J Clin Nutr. 2017 Feb;105(2):343-351. doi: 10.3945/ajcn.116.135327.